Jean-François Dichamp

En 1982, apareció en las pantallas de televisión un joven de 12 años interpretando a Mozart cuando era niño al lado de Michel Bouquet en la película de episodios de Marcel Bluwal consagrada a la vida del compositor de «Las bodas de Figaro». Después de esta experiencia como actor, Jean-François Dichamp, quien desde sus inicios con su madre, se sentía más músico que actor, iba pronto a preferir el camino sinuoso del Conservatorio de Paris y de los concursos internacionales. Primer premio por unanimidad del
Conservatorio Nacional Superior de Música de Paris en 1986, Jean-François no tarda en volverse en uno de los más brillantes estudiantes de Nikita Magaloff y de Maria Curcio, discípula de Schnabel, quien le brinda un conocimiento profundo del piano y amplia su horizonte musical.
La cosecha de recompensas internacionales pronto se anuncia floreciente: tres premios en el concurso internacional de Santander (Premio de finalista, Premio especial «talentos
jóvenes» y el Premio «especial Chopin» entregado por la esposa de Arthur Rubinstein) son el punto de partida de una carrera acogida tanto en Polonia, Irlanda, Inglaterra (donde vivió cuatro años), Alemania, España, Turquía, Rumanía como Estados Unidos, Mexico,
Colombia, Chile, Holanda, Portugal, Argelia, Chipre, y Paraguay : «A very sensitive artist» dice el Times, «dones innatos para Chopin» le contesta en eco The Independent on
Sunday. La prensa mexicana también se entusiasma con él como El Norte «su presentación fue un verdadero acontecimiento musical y así lo entendió el público que le ovacionó de pie al término de su magnífico recital».
Invitado por France Musiques y los Festivales Chopin de Duzniki (Polonia), de las «Chorégies d’Orange», de los «Midis Musicaux du Châtelet» en Paris, de la «Festa da
Musica» en Lisboa, el Festival Internacional de la Roque d’Anthéron y las «Folles Journées de Nantes». Participó también tres veces en el Festival Internacional de Frutillar en Chile, el Festival de Piano de Monterrey en México, y dos veces en la «International Piano
Series» de Charleston en South Carolina (USA).

Y en los primeros capítulos de su carrera discográfica para la casa Lyrinx, dos discos, uno consagrado a Chopin, y otro a Liszt fuertemente ovacionados por los críticos :

«Jean-Francois Dichamp es un pianista elegante y sutil de una extrema delicadesa»
Le Monde de la Musique

«(…) en adelante está listo para competir con los más grandes »
Madame Figaro

«Su Chopin es a la vez acabado y vivido a fondo »
Diapason

En 2020, la revista «Melómano» le otorgó un «Melómano de Oro» para su último disco «Goyescas, an Opera for piano» juntando el ciclo de Granados con Sonatas de Scarlatti y de Soler.